Entrevista a Julia Rey Rodríguez, becada por la Fundación Amancio Ortega para cursar 1º Bachillerato en Canadá

Seguimos con las entrevistas a las alumnas que consiguieron becas tanto del Concello como de la Fundación Amancio Ortega, para cursar 1º Bachillerato en Canadá o USA. 

Hoy le toca el turno a Julia Rey Rodríguez. ya de vuelta tras vivir uno de los mejores años de su vida en Canadá, nos cuenta cómo fue su experiencia. 

1. ¿Por qué quisiste ir a cursar 1º Bachillerato a USA/Canadá? ¿Qué te animó a hacerlo?

Siempre quise hacerlo pero la persona que realmente me convenció de dar el paso y hacerlo fue mi hermana mayor.

2. ¿Cómo fue el recibimiento que tuviste por parte de tu nueva familia y de tus nuevos compañeros?

La verdad fue genial, pensé que la relación con mi familia iba a ser muy fría los primeros días porque no nos conocíamos de nada pero desde el minuto cero me hicieron sentir como en casa. Con la persona que más me preocupaba no llevarme era con mi host sister, otra estudiante internacional de Japón pero al igual que con mi familia nos llevamos genial desde el primer momento.

Con mis nuevos compañeros fue digamos interesante, al venir a un pueblo tan pequeño como el mío pensé que iba a ser la novedad, pero para nada, aquí tienen estudiantes de intercambio todo el tiempo y están acostumbrados a ellos. Eres tú el que tiene que ir y hablar con ellos pero todo el mundo es muy majo y si eres un poco hablador haces amigos enseguida.

3. ¿Te costó adaptarte los primeros días?

La verdad es que sí, la primera semana llevaba a casa con la cabeza como un bombo de tanto escuchar inglés pero me acostumbré bastante rápido la verdad.

4. ¿Te pareció difícil relacionarte con la gente del instituto en un idioma diferente?

Pensaba que iba a ser muy difícil pero como en Canadá hay gente de muchas partes del mundo están acostumbrados a los acentos y te entienden bastante bien incluso los primeros días con todo el acento que puedas tener. Eso sí, si no te entienden te dirán el mítico “I’m sorry but can you repeat that please?”

5. Tus horarios y tu rutina ahí, ¿son muy diferentes a los que tenías en España?

Son completamente distintos, el tener que levantarse temprano para coger el bus del colegio durante media hora y llegar a la escuela tempranísimo (sí, el bus es el amarillo de todas las pelis que piensas que va a ser maravilloso pero después de una semana solo rezas para no tener que ir en el nunca más porque es la cosa más incómoda der mundo). Las clases son más largas pero tienen descansitos al final de cada una, el tiempo de la comida es mucho más corto (y a las 11:30!)

Los deportes ya son otra cosa, ya perdí la cuenta de cuantas veces justo al acabar la última clase tuve correr por los pasillos para poder cambiarme de ropa y no llegar tarde al entrenamiento.

6. ¿Qué te llamó más la atención de las costumbres de allí?

Me llamo mucho la atención la cantidad de veces que dicen “I’m sorry”, al principio bromeaba con mis amigos por la de veces que lo decían, pero la verdad ahora yo lo digo 24/7 y la mitad de las veces ni te enteras.

También me llamo mucho la atención las horas de las comidas, si eres como yo, desayunas a las 6:30, comes a las 11:30 y cenas a las 6.

7. ¿Te costaba seguir las explicaciones de los profesores al ser en otro idioma?

La primera semana en física y en inglés me enteraba de lo justo pero es increíble lo rápido que te acostumbras a ello.

8. ¿Los profesores te trataban como a los demás, o eran más comprensivos contigo por ser extranjera y no dominar el idioma?

Para los profesores eres una alumna más, pero si necesitas ayuda están más que dispuestos a hacer todo lo posible para que lo entiendas mejor.

9. ¿Qué sentías unos días antes de ir y en el avión de camino a tu nueva aventura?

Ganas, sentía una ganas increíbles de empezar lo que sería el año de mi vida. Y sentía nervios, no por tener que marcharme, por si se me olvidaba algún papel para pasar por la aduana, o el pasaporte o sabe dios qué.

10. ¿Fue fácil hacer amigos?

A mi me fue muy fácil hacer amigos porque soy una persona muy habladora y como tenía un nivel más o menos decente de inglés podía comunicarme, eso sí, me llevaba un rato pillar los chistes y así.

11. ¿Cuál fue tu primera impresión de tu nuevo hogar, de tu nuevo instituto y de tu nueva ciudad?

Mi casa fue WOW, literalmente WOW. Mi host family tiene una casa increíble y bastante grande la verdad, y pasar de vivir en un piso en Coruña a una casa en el medio del monte fue un cambio, porque si, vivo en el medio del monte.

Mi cuidad, que más bien es un pueblo de 2000 personas, me dio la impresión de que no iba a hacer nada que hacer y la verdad creo que no tuve una tarde libre desde que llegué casi.

El colegio me encantó, es pequeño porque no hay mucha gente, pero es un high school musical en miniatura, con las taquillas y todo.

12. ¿Te costó acostumbrarte?

La verdad, me sorprendió lo poco que me llevo acostumbrarme, en cosa de dos semanas estaba más que acostumbrada y más o menos ya sabía como funcionaban las cosas aquí.

13. ¿Qué lugares visitaste? ¿Qué te parecieron?

Okay, esta es el la pregunta en la que digo, si, fui a Toronto (que me encantó) a Niagara Falls (de las que me enamoré) a Tobermory (que creo que es uno de los sitios más bonitos que vi en toda mi vida) Pero desde luego el lugar que menos me esperaba visitar mientras estaba en Canadá fue… la República Dominicana, mi familia decidió hacer un viaje en invierno para salir un poco de esos 20 grados bajo cero e irse a algún sitio más cálido. Desde luego ese fue el highlight del mes de febrero.

14. ¿Qué fue lo que más echaste de menos de España?

COMIDA. Canadá tendrá mil cosas buenas y algunas mejores que España pero en lo referente a la comida les llevamos años de ventaja.

15. ¿Crees que esta experiencia te ha hecho cambiar en algún aspecto tu personalidad?

No creo que cambiara mi personalidad pero ahora se un poco mejor que me gusta y que no, que puedo aguantar y lo que no. Me ayudo a conocerme un poco más a mi misma.

16. ¿Te gustaría quedarte un año más?

¿Dónde hay que firmar? Desde luego me encantaría quedarme un año más y diría que sí sin pensármelo dos veces.

17. ¿Qué opinas de esta experiencia? ¿La repetirías? ¿Les recomendarías a otros que la vivieran?

Opino que decir que sí a venir a Canadá y vivir esta experiencia es la mejor decisión que tomé hasta el momento. La repetiría sin pensarlo y no cambiaría ni una sola cosa. Y sí, lo recomendaría 110%, si estás pensando en hacer un intercambio, hazlo, no lo pienses dos veces.